En este artículo vimos algunos trucos para aprovechar espacios en cocinas y baños. Hoy es el turno del salón y el dormitorio, que dejamos pendientes.
En ambas estancias nos falta siempre espacio, porque son las que más muebles, auxiliares y objetos guardan. Así que lo primero es hacer un buen repaso y limpieza a todo lo que vamos acumulando con los años. Un salón y un dormitorio ordenado no solo parecen más grandes, sino más confortables.
Sofá en esquina
Uno de los elementos más voluminosos es el sofá. Si sustituyes el habitual 3+2 por un sofá con chaiselongue, sacarás partido a la esquina. Los hay con asientos abatibles, para que puedas guardar las mantas.
Otra solución, más versátil y adecuada para huecos pequeños, es adquirir un sofá y un puff con la misma tapicería. Este último te servirá de reposapiés o de mesa de centro, según tus necesidades.
Si tu salón tiene muchos pilares y esquinas, lo mejor es aprovechar espacios con muebles a medida. Además, si no tienes muchos metros, una librería hasta el techo sacará mucho partido a esos rincones y a la altura de la habitación. Apuesta por un modelo abierto y de color claro, para que parezca más ligera.
Otra idea es colocar en un retranqueo o junto al sofá una cómoda antigua, decapada o pintada. Te servirá de mesita auxiliar para dejar las llaves, cartas, una lámpara… Y para guardar la mantelería. ¿Más ideas? Utiliza una para guardar el portátil, la tablet y el material de oficina y trabajo.
Bajo la ventana
Bajo la ventana suele haber otro hueco desperdiciado. Para aprovechar espacios aquí, lo primero es sustituir las cortinas por estores. Éstos, al ser más ligeros, dejan pasar la luz y amplían ópticamente el espacio.
Una vez despejado el espacio, bajo el marco puedes poner un banco. Te servirá para sentaros a la mesa o ampliar el número de asientos en el salón. Y si lo haces en el dormitorio, tendrás un zapatero estupendo.
Barras y ganchos
El esta estancia, puedes convertir las puertas en una extensión de tu armario. Con barras y ganchos, puedes organizar los bolsos, pañuelos, corbatas y bisutería.
Otra solución para aprovechar espacios son los cabeceros con módulos extraíbles. En este mueble integrado podrás guardar libros, cosméticos, cargadores,…
En vez de cambiar el cabecero puedes colocar una cómoda o dos a cada lado de la cama, sustituyendo las clásicas mesitas de noche. Tendrás más huecos para guardar la ropa de cama, pijamas, lencería, etc.
Cuarto infantil
En el cuarto de los niños puedes colocar especieros a modo de librería. Las tapas te servirán como elemento decorativo. Si tus hijos son pequeños, encarga una barra adicional para su armario. Como su ropita es corta, duplicarás su capacidad por muy poco dinero.
Finalmente, mencionar el almacenamiento extra más obvio y antiguo que existe: debajo de la cama. Si no tienes un canapé abatible, utiliza cajas de plástico con ruedas.
Para los cuartos infantiles, muchos fabricantes tienen camas altas. Bajo las mismas puedes instalar camas-extra, cajoneras, librerías, armarios o zonas de estudio. Y te pueden convertir las escaleras en cajones.